El dinero y el gato

Yo inicié mi vida laboral a los 19, trabajando como auxiliar de almacén y ganando $1900 mensuales. Mi primer sueldo; sentía que era mucho dinero, jajaja.

Pero las necesidades fueron aumentando y mi obsesión por ganar más dinero también. Pero el crecimiento económico fue muy lento.

Hay quien nace con habilidad para hacer dinero, pero la mayoría no sabemos como. Y mucho va en cómo nos relacionamos con él.

Algo que aprendí a lo largo de mi vida es que el dinero es como un gato: entre más lo persigues, menos lo alcanzas.

Pensemos en ese gato... Si lo trato de agarrar a la fuerza, sale huyendo. Un gato se acerca solo; si siente buena vibra, se dejará acariciar. Pero en el momento que quiera, se alejará. Si trato de retenerlo, se molestará. Y si se molesta, ya no se volverá a acercar tan fácilmente.

Si se quiere ir, lo mejor es dejarlo que se vaya. Ya regresará y podré acariciarlo nuevamene.

Al final me acostumbo y ya no pienso en el gato... El gato va y viene y yo solo disfruto el momento en que aparece. Y cuando se va, sé que regresará.

El dinero es igual. Entre menos piense en él, mejor fluirá. Ya está claro que lo quiero, que lo necesito, por lo tanto, ya no es necesario pensar en él.

En vez de eso, me he enfocado a identificar lo que me apasiona. Qué de mi actividad diaria me produce alegría y me llena de energía. Encontré que enseñar, guiar, ayudar a otros a aclarar sus dudas... Eso es lo que me apasiona. Y dedico mucho de mi tiempo a ello. Y desde que mi mente y espíritu están enfocados en hacer lo que me apasiona, se han abierto muchas oportunidades. Mis relaciones sociales y laborales se han incrementado y mejorado; mi trabajo se ha ido reconociendo; he ido construyendo una reputación favorable.

Y todo esto se ha traducido.... Sí, efectivamente, en más dinero.

Cuando aprendí a dejar de pensar en el dinero y a enfocarme en hacer y desarrollar aquello que me apasiona, el dinero empezó a fluir solo.

No me hice millonario... Eso sigue siendo un misterio para mí. Pero al menos llevo una vida económica estable y tranquila. Además de llena de muchas satisfacciones más allá de lo económico.

Namasté 🙏